El paisaje
Del verde primaveral, al dorado y rojizo otoñalEl paisaje
La comarca de Rioja Alavesa tiene una extensión de 316 km2 de tierras rojas y privilegiadas para el cultivo de la uva, cuyos viñedos tiñen el paisaje de verde intenso en primavera, y de matices dorados y rojizos en otoño, otorgándonos postales excepcionales cada año. Paisajes únicos de lomas y praderas de viñedos interminables, salpicados de olivos, dólmenes, restos prehistóricos, villas medievales con recintos amurallados, casas solariegas, cultivos frutales, iglesias históricas e infinidad de bodegas.
Es una zona que, por sus dimensiones moderadas, las cortas distancias entre los quince municipios que la conforman y sus prácticos accesos, ofrece una buena excusa para recorrer de sol a sol unos paisajes en los que se palpa la cultura del vino en cualquier rincón. La comarca está limitada al sur por el río Ebro y al Norte por el imponente macizo de color ceniza de la Sierra de Toloño.
Rioja Alavesa, con su peculiar trazado y las múltiples actividades de la Ruta del Vino, es una de las comarcas vitivinícolas más atractivas del panorama internacional y un destino inexcusable para el viajero que busca sabores, paisajes y sensaciones únicas. En Rioja Alavesa confluyen el turismo, la arquitectura, el arte y, por supuesto, el vino y la gastronomía.
Tierra y vino son los rasgos fundamentales del carácter y los paisajes de la comarca, en la que la cultura del vino es manifiesta.